El final de Santa Fe no podía ser más triste, el cuadro Cardenal cayó 1-0 en Bogotá ante las Águilas de Rionegro. Un final de quinta categoría para un León que alcanzó a ilusionar bajo la batuta de Grígori Méndez pero tristemente se quedan por fuera de los ocho.
Los Leones deben reforzar su nómina para el segundo semestre, en la plantilla actual hay mucho jugador preocupado más por andar rezando que jugando al fútbol. La parte religiosa es muy respetable pero no solo de rezo vive el hombre, hay que poner una pizca de talento.